Presentados los diseños de los nuevos tronos del Dulce Nombre y el Niño de la Bola

En la tarde noche del viernes 10 de julio ha tenido lugar la celebración del Cabildo General Extraordinario en el cual se presentaba a los hermanos el nuevo proyecto de trono tanto para el Dulce Nombre de Jesús como para el Niño de la Bola. Desde Sevilla acudieron el tallista Julián Sánchez y los orfebres Juan y Javier Fernández para explicar los detalles del proyecto.

Con una introducción por parte de nuestro Hermano Mayor y presentados por nuestro Albacea General, en primer lugar fue Juan Fernández quien expuso el proyecto de los futuros faroles que llevará el trono del Dulce Nombre, con un diseño atrevido y en consonancia con el estilo que llevará el trono. Se disponen los faroles con forma ochavada, siendo cuatro de sus caras las que disponen de cristal y las otras cuatro las que forman los soportes de la parte superior, en la cual figura tanto la corona real, en alusión a la realeza de María, como la cruz de la Orden de Predicadores, origen de nuestra Archicofradía.

Desvelados los faroles, le tocó el turno a Julián Sánchez, tallista ya conocido en nuestra Archicofradía por ser el encargado de realizar el trono del Stmo. Cristo de la Misericordia y que en esta ocasión ha presentado un trono valiente y cargado de detalles cogidos de las iglesias de Archidona. El trono presenta un frontal con una prominente capilla donde irá ubicado un relicario, utilizando un recurso de telas encoladas sujetas por dos querubines, muy poco visto en tronos de procesión pero usado en retablos de iglesia. La trasera resulta ser asimétrica con respecto al frontal utilizando el tipo de capillas que se repiten por los laterales y completa el conjunto la inclusión de los doce apóstoles tallados a lo largo de todo el perímetro.

Para el trono del Niño de la Bola se ha optado por una gran peana de carrete que hace aumentar el tamaño del trono pero a su vez reduce considerablemente el peso del mismo por el empleo de materiales mucho más ligeros, siempre pensando en la corta edad de sus pequeños horquilleros. De la propia peana, que sigue el estilo del trono del Dulce Nombre, salen cuatro arbotantes de las esquinas, con dos puntos de luz cada uno, para realce de la imagen de nuestro Sagrado Titular.

Presentados los dos proyectos, se procedió a la votación de ambos siendo aprobados por la unanimidad de los presentes, recibiendo sendos aplausos muy acalorados, en lo que supone un trabajo de gran envergadura que la Archicofradía acometerá sin haberse planteado plazos iniciales y siempre dentro de lo que las circunstancias lo permitan.